Mónica Oltra, en la reunión de la diputación permanente de Les Corts Valencianes donde se ha convalidado el decreto - ley del gobierno del PP que pretende destruir el barrio del Cabanyal, ha inaugurado un término de nuevo cuño: las barberidades.
Es evidente que, si en algo ha contribuido el PP a mejorar nuestras vidas, ha sido en el tema de la lengua -no me refiero, evidentemente, al cumplimiento de la Ley de Creación de RTVE y el uso del valenciano en el medio público-.
El uso del alemán en el debate político de los últimos meses o la aparición de nuevos vocablos asociados a las acciones y decisiones de los diferentes gobiernos peperos dejarán huella -espero que borrable- en algunos de nosotros: las barberidades, las campsadas, los costalazos o las blascadas dan un nuevo aire, ni fresco ni limpio, a esto que estamos viviendo.
Espero que con fecha de caducidad.
Es evidente que, si en algo ha contribuido el PP a mejorar nuestras vidas, ha sido en el tema de la lengua -no me refiero, evidentemente, al cumplimiento de la Ley de Creación de RTVE y el uso del valenciano en el medio público-.
El uso del alemán en el debate político de los últimos meses o la aparición de nuevos vocablos asociados a las acciones y decisiones de los diferentes gobiernos peperos dejarán huella -espero que borrable- en algunos de nosotros: las barberidades, las campsadas, los costalazos o las blascadas dan un nuevo aire, ni fresco ni limpio, a esto que estamos viviendo.
Espero que con fecha de caducidad.
1 comentaris:
Sí, la raó és més forta que la "barberitat" i com diu Mónica.... guanyarem esta batalla perquè amor no ens falta.
Publicar un comentario