Dice el segundo de a bordo que nuestro síndic "es un militante más", en referencia a las declaraciones del mismo sobre pactos electorales con el Bloc.
Que para minusvalorar las declaraciones del Síndic del grupo parlamentario y hacer evidente el legítimo desacuerdo de la mayoría de la dirección que lo mantiene en el cargo respecto al también legítimo posicionamiento favorable de una parte de la organización a que la militancia de EU pueda hablar, analizar, discutir y, si toca, votar, la conveniencia, necesidad, posibilidad, predisposición, consecuencias, estrategias, etc de posibles alianzas, electorales o no, con otras fuerzas políticas, -lo que algunos llaman abrirse a la sociedad y actuar, por fin, como un verdadero movimiento político y social-, utilice el "es un militante más", parece expresar que existe en nuestra organización diferentes Categorías de Opiniones, las de "los militantes más" y las de "los otros", que deben responder a criterios de diferenciación que sólo una minoría escogida conoce (al menos, yo no).
Desde el profundo respeto y, en muchos casos, admiración que la militancia en Esquerra Unida me merece, no comparto en absoluto el uso de esta calificación como herramienta de desprestigio político, como arma arrojadiza, como elemento de menosprecio, hacia una opinión y un planteamiento expresado públicamente. Sin entrar a valorar el contenido de la misma, si esa opinión, a juicio de la dirección, va en contra de "la postura oficial" hay, en EU, mecanismos más que suficientes para exigir responsabilidades políticas por lo dicho, pero en nigún caso mediante el gran activo que es nuestra militancia.
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