No recuerdo otras elecciones donde se haya hablado más de casos de corrupción que en estas próximas del 27 de mayo.
.
Entre aumentos espectaculares de censos electorales con el supuesto objetivo de mantener la Diputación de Castellón en manos del PP, los casos de supuesta manipulación fraudulenta de votos por correo en Melilla y en Canarias y algunas cosillas más que han surgido en prensa en estos días, el escándalo debería ser mayúsculo.
.
El PP, sin embargo, gira la cabeza hacia otro lado y "no sabe/no contesta", escondiendo bajo tierra la vergüenza, la honradez y la responsabilidad. Si añadimos a ello todo lo aparecido estos días sobre los ingresos de Carlos Fabra y el incremento patrimonial realmente espectacular de Francisco Martínez, números uno y dos respectivamente de la citada Diputación de Castellón, se entiende que, a falta de pruebas suficientes y de juicio por cohecho, prevaricación y una veintena de cargos más, el control de la Diputación de Castellón sea motivo más que suficiente para el Partido Popular para justificar, con su silencio, el "todo vale" de los dirigentes peperos castellonenses.
.
Me gustaría saber -supongo que igual que a muchos en este país- cuántos favores les habrá hecho y cuánto podría hablar el tipo este de las gafitas oscuras y su colla de amigachos a los jerifaltes del PP (Aznar, Rajoy, Zaplana y ahora Camps) para que todos muestren públicamente su apoyo a tan claro ejemplo de corrupción y ataque a las instituciones y a la democracia. Algún día a partir del 27-M.
0 comentaris:
Publicar un comentario