Desde Delegación de Gobierno (elíjase la que se quiera: Madrid, Barcelona o Valencia) nos acaban de comunicar que a este cuerpo de funcionarios públicos les acaban de cambiar de nombre: ahora en lugar de llamarse Policía Antidisturbios se llamará Policía Montadisturbios.

Para que nadie proteste y se queje de los cambios, nos informan que el sobrecoste de reparar las abolladuras de los escudos producidas por el impacto con las cabezas y la limpieza de las porras de las manchas de sangre de los ciudadanos objeto de tal dedicación no repercutirá sobre los mismos y será asumido en el próximo ejercicio presupuestario mediante la subida de impuestos, el IVA, el IRPF, la bajada o desparición de pensiones o cualquiera otro tipo de recorte económico o social y de derechos que se le ocurra al inútil ministro de turno del gobierno de Rajoy.

Junto con esta comunicación se acompaña también el video de felicitación del Director General de la Policía a la actuación de sus muchachos durante las concentraciones ciudadanas frente al Congreso de los Diputados. Por razones de sensibilidad social se omite este video para no herir susceptibilidades (las nuestras)