Ha dicho el President Camps que no quiere para Valencia el tripartito a la catalana, seguido de una catarata de improperios y descalificaciones hacia el mismo.
Además de revalidar su anticatalanismo acérrimo, visceral y corrosivo, que le permite, sin embargo, descalificar y al mismo timpo aprovecharse de aquellas cosas que han sabido pactar en la negociación de su Estatut -dejándole en evidencia de paso junto a su colega Pla- se le nota un tanto preocupadillo por si resulta que, después del último domingo de mayo, ésa es justamente la fórmula que le descabalga de su poltrona de mando. Desde luego, algo tendremos que aprender de Saura y de Iniciativa si queremos tener esa oportunidad de derribar -a este sí- al PP del trono de poder.
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